¿Qué es la pantalla negra con cursor?
La pantalla negra con cursor es un problema que puede ocurrir en cualquier ordenador con Windows 10. Este problema se caracteriza por una pantalla en negro con un cursor parpadeando en la pantalla. A pesar de que el cursor se mueve, no se puede hacer nada más en el ordenador. Este problema puede ser causado por varios factores, como problemas de hardware, problemas de software, problemas de actualización y más. Problemas de hardware
Uno de los problemas de hardware más comunes que puede causar la pantalla negra con cursor es una falla en la tarjeta gráfica. Si la tarjeta gráfica falla, es posible que la pantalla quede en negro. Otro problema de hardware puede ser una falla en el disco duro. Si el disco duro falla, es posible que el sistema operativo no pueda iniciarse correctamente y la pantalla quede en negro. Problemas de software
Los problemas de software también pueden ser la causa de la pantalla negra con cursor. Si hay un problema con el sistema operativo, es posible que la pantalla quede en negro. También puede haber problemas con los controladores, lo que puede causar que la pantalla quede en negro. En algunos casos, los virus y malware también pueden causar la pantalla negra con cursor. Problemas de actualización
Las actualizaciones de Windows 10 también pueden causar la pantalla negra con cursor. Si una actualización se interrumpe o se instala incorrectamente, es posible que la pantalla quede en negro. También puede haber problemas con las actualizaciones de los controladores y los programas, lo que puede causar que la pantalla quede en negro. Cómo solucionar el problema
Hay varias soluciones que puedes intentar si tienes problemas con la pantalla negra con cursor en Windows 10. Una de las soluciones más simples es reiniciar el ordenador. En algunos casos, esto puede solucionar el problema. Si reiniciar no funciona, intenta arrancar el ordenador en modo seguro. Para hacer esto, mantén presionada la tecla F8 mientras el ordenador se inicia. Selecciona la opción de arranque en modo seguro y espera a que se inicie el sistema operativo. Si el ordenador se inicia en modo seguro, puedes intentar solucionar el problema desde allí. Otra solución es actualizar los controladores. Para hacer esto, abre el Administrador de dispositivos y busca los controladores que necesitan actualización. Haz clic derecho en el controlador y selecciona la opción de actualizar el controlador. Si todo lo anterior no funciona, puedes intentar restaurar el sistema a un estado anterior. Para hacer esto, busca la opción de Restaurar sistema en el menú de inicio y sigue las instrucciones en pantalla. Conclusión
En conclusión, la pantalla negra con cursor es un problema común en Windows 10. Puede ser causado por problemas de hardware, problemas de software, problemas de actualización y más. Hay varias soluciones que puedes intentar para solucionar el problema, como reiniciar el ordenador, arrancar en modo seguro, actualizar los controladores y restaurar el sistema a un estado anterior. Si ninguna de estas soluciones funciona, es posible que debas buscar ayuda de un experto en informática.
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